sábado, noviembre 9, 2024

LICENCIAS EN DUDA: SECTOR SALUD

Share

El retorno de cientos de trabajadores de la Secretaría de Salud de Yucatán a sus centros laborales, después de una licencia de cinco meses por decreto federal, saca a la luz que muchos recurrieron al beneficio sin necesitarlo, o al menos en condiciones que generan dudas.

El decreto, que llegó a su fin el 31 de julio, permitió que se ausentaran de sus labores los empleados mayores de 60 años o con algún padecimiento crónico, aunque no alcanzaran esa edad.

En la lista de más de 1,800 empleados de la dependencia estatal que gozaron de la licencia asoman, en efecto, muchos mayores de 60 años, pero también gente de 26 a 40 años que expuso variados argumentos para que le otorgaran la autorización.

En la relación, que está bajo el control de la dirección de Recursos Humanos de la SSY, se observan, entre otros, conceptos como mal de Chagas, lupus y artritis reumatoide. Es decir, son padecimientos del personal solicitante del beneficio, jóvenes en buena medida.

También aparecen términos como lactancia, “hijos menores”, “contacto Covid” y “contacto Perú Covid” en empleados de 30 a 40 años.

Bajo los dos últimos conceptos se beneficiaron con cinco meses sin trabajar personas que argumentaron que tuvieron cercanía con algún enfermo de Covid, cuando, según los propios médicos, bastan dos o tres semanas de aislamiento cuando mucho.

El “contacto Perú Covid” lo expusieron quienes viajaron al país sudamericano en aquella excursión que significó la muerte de un profesor yucateco y de algunos contagios de integrantes del grupo. Esto ocurrió en los últimos días de marzo.

Hay casos de empleados —de todas las áreas, incluyendo la administrativa— de 30 años en promedio que argumentaron diabetes, hipertensión y reumatismo.

De acuerdo con los datos recabados, muchos de los beneficiados no tienen expediente clínico. En teoría debieron presentar una valoración del Issste para sustentar la solicitud de licencia, pero en marzo —mes en el que entró en vigor el decreto federal— esa dependencia y todo el sector salud estaban enfocando todos sus esfuerzos a la atención de la pandemia, que apenas se iniciaba en México. Así, para entrar al beneficio se presentaron incluso oficios de médicos particulares, según nuestras fuentes.

Con el retorno, que oficialmente debió empezar ayer, también se ven venir problemas, pues se sabe de varios trabajadores que han recurrido o planean recurrir al amparo contra la disposición. Esta estrategia se sigue no solo en la SSY sino en otras instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

La licencia otorgada en marzo motivó pesada carga de trabajo en varios centros hospitalarios. Por ejemplo, solo en el Hospital O’Horán quedaron fuera 105 médicos y 104 enfermeras.

Muchos doctores que trabajan para la Secretaría de Salud son jubilados del IMSS y ni siquiera están de tiempo completo en la SSY. Son numerosos los casos de quienes recibieron la licencia desde marzo —por tener más de 60 años, principalmente—, pero siguieron en sus consultorios privados.

La mayoría de quienes se beneficiaron con el decreto federal hizo los trámites directamente con Recursos Humanos de la Secretaría. Según se averiguó, menos del 10 por ciento lo realizó por conducto del sindicato.

Unos 1,800 trabajadores de la Secretaría de Salud de Yucatán se ausentaron por licencia.

Valoración previa

Hasta hoy no se sabe cuántos de esos empleados se reincorporarán, porque debieron someterse previamente a una valoración médica para determinar quiénes están en capacidad de hacerlo. El proceso de retorno comenzó ayer.

Personal a la mano

Hay una propuesta sindical para que, de requerirlo, se contrate a enfermeras que terminaron su pasantía el 31 de julio. Laboraron en áreas Covid y, por tanto, no requieren capacitación.

El sector salud completo

Además de los 1,800 empleados de la SSY, gozaron de licencia 683 del IMSS, 532 del Issste y 156 del HRAE.

Minuto a Minuto

Noticias Locales