Las organizaciones mayas Múuch Xíinbal y Chuun T’aan y sus asesores jurídicos consiguieron tres nuevas suspensiones de los trabajos de construcción del Tren Maya en el tramo 3 de Yucatán.
Los nuevos amparos los concedió provisionalmente el Juzgado 4o. de Distrito, con sede en Mérida, en teoría son para que se suspendan los trabajos del Tren Maya hasta que el juzgado federal dicte una sentencia definitiva.
En los hechos estas sentencias federales no se respetan porque Fonatur alega que solo da mantenimiento a la vía, pero en realidad realizan desmontes y construyen vías ferroviarias, según admitió el abogado del equipo Indignación, Jorge Fernández Mendiburu.
“Continúan las obras, es visible. Si vas por la carretera vez que están trabajando, (los de Fonatur) dicen que están dando mantenimiento a las vías, lo que no es cierto”, señaló en rueda de prensa en la plataforma Zoom.
“Los jueces y juezas federales deberían poner mayor atención a sus sentencias porque no se están cumpliendo, están permitiendo una simulación”, enfatizó. “Las empresas y Fonatur podrían estar incurriendo en un delito al no respetar las suspensiones que otorgan los amparos”.
Otro abogado, José Orvelín Montiel Cortés, informó que promoverán juicios de inejecución, son recursos legales que llevan su tiempo; sin embargo, darán mayores elementos a los jueces federales para que tomen cartas en estos asuntos de desacato.
Los tres nuevos amparos contra el Tren Maya los presentaron las asociaciones mayas por medio de sus asesores jurídicos el 20 de enero. Impugnan la constitucionalidad del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) que aprobó la Semarnat a Fonatur para la construcción del tren. En ellos se exponen al menos tres violaciones en la MIA aprobada por Semarnat:
1) La violación al derecho a la información, pues las comunidades indígenas a la que pertenecen los quejosos no tuvieron acceso en ningún momento a los estudios derivados de la MIA; por tanto, no saben el impacto ambiental que tendrá esta obra en sus territorios.
2) Violación al derecho a la información de las comunidades indígenas. No tuvieron una adecuada participación para la determinación del mega proyecto ferroviario, como lo establece la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
3) La omisión de realizar una evaluación ambiental regional que incluya todo el estudio de los impactos del proyecto en forma integral. No debieron seccionarlo por tramos porque no se aprecia el impacto acumulativo total.
Con esos tres nuevos amparos, según informaron, ya son 12 los recursos promovidos por los grupos indígenas y habitantes que se oponen al proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Dos amparos están radicados en Chiapas contra el tramo de Palenque, tres más en Campeche, seis en Yucatán y uno en Quintana Roo. Los promoventes ya ganaron seis amparos en forma provisional, uno está en la Suprema Corte de Justicia y otro acaba de resolver que lo atienda el juzgado federal de Cancún, los demás están en juicio sin una resolución.
Hasta hoy, ninguna sentencia ha sido definitiva.
Pobladores /Rechazo al Tren Maya
Tres nuevos amparos fueron concedidos parcialmente contra la obra presidencial.
Ven amenaza
Las representantes de las comunidades mayas Valiana Aguilar, Gregorio Hau, José Koyoc y Guadalupe Chan expusieron con amplitud las afectaciones a sus comunidades, la discriminación que sufren con este proyecto y el riesgo que los desarrollos inmobiliarios que generará el Tren Maya se conviertan en “Cancunes y Playas del Carmen” por tanto turismo que llegan al lugar.
Violaciones
Los amparos concedidos parcialmente en los juzgados federales mostrarían que el Tren Maya es una obra que viola los derechos de los pueblos originarios, las leyes ambientales, las disposiciones sanitarias, el derecho a la libre determinación, el derecho a la información y otras garantías constitucionales.
